El unboxing continúa siendo un fenómeno de mucho éxito debido al auge del comercio electrónico. Literalmente significa desempaquetando. Pero se trata de capturar en vídeo todo el proceso de desembalar productos para subir a algún canal de Internet como puede ser YouTube u otra red social. Fue en el año 2006 cuando se realizó el primer unboxing gracias a un youtuber que mostraba un teléfono avanzado en aquella época. En un primer momento esta tendencia se centró en artículos de tecnología o moda, pero actualmente se hace para casi todo tipo de compras.
Es cierto que una buena plataforma digital que facilite la navegación y un pago seguro son dos de las características que más valora un comprador online. Sin embargo, la experiencia continúa cuando se recibe el pedido. Justo en este punto existe una gran oportunidad para fidelizar al cliente gracias a la importancia del embalaje o packaging. Se trata de conseguir una experiencia unboxing positiva, atractiva y que se diferencie de otras marcas similares.
Aspectos importantes
El paquete es el primer contacto físico que se tiene del producto por lo que se prestará especial atención a:
- Elegir el embalaje adecuado y a medida para garantizar que el artículo llegue en perfecto estado.
- No solo habrá que cuidar el envoltorio, sino que es recomendable personalizarlo con las señas de la marca y tratar de ser original.
- La creatividad y la impresión de texturas con relieve logran llamar la atención del consumidor gracias a las sensaciones que produce el tacto.
- Usar materiales reciclables y sostenibles. Se debe evitar un embalaje excesivo con paquetes demasiados grandes o relleno innecesario.
- Reflejar la identidad corporativa para que el cliente identifique fácilmente el carácter de la marca.
- Cuidar los pequeños detalles con la preparación de tarjetas personalizadas, mensajes o pequeños obsequios que sorprendan al cliente online en el momento del unboxing.
En definitiva, el éxito para fidelizar al consumidor online también está en escoger el mejor packaging para cada producto. Si se suma algún valor añadido la decisión de compra del consumidor se verá reforzada y afianzada.
Fuente: Interempresas